Tener unos negocios en casa, sobre todo para emprendedores que están comenzando parece ser la opción más obvia. ¿Para qué gastar dinero en una renta adicional si ya pagamos la de casa o si nos sale gratis trabajar ahí? Además puedes trabajar en pijama todo el día, no gastas en comida y servicios adicionales y puede llegar a ser una opción muy cómoda, sobre todo si tienes una startup digital. Suena bien, ¿verdad?
Pues la verdad es que es una opción con muchísimas ventajas, pero también tiene aspectos que nadie te cuenta y que luego pueden pasarle factura a tu emprendimiento.
Negocios en casa VS vida personal
Mantener la frontera entre la vida personal y el trabajo es muy complicado, pero no imposible cuando se trabaja desde casa. Solo piénsalo: te levantas por la mañana, desayunas, todos los que viven contigo se marchan a trabajar o al colegio y ¡listo! La casa es toda tuya para comenzar. ¡Maravilloso!
La verdad es que no es tan bueno como parece, cuando se trabaja desde casa, se necesita mucho foco y organización, las fronteras entre la vida personal y el trabajo se difuminan mucho porque se comienza a trabajar en todo momento y a hacer las tareas de la casa al mismo tiempo, esto tiene dos consecuencias inmediatas. La primera de ellas es que es muy difícil tener tiempo para ti mismo lejos del trabajo, básicamente porque el trabajo está en casa, y en segundo lugar porque estás rodeado por miles de cosas que te pueden distraer.
Esto no significa que trabajar desde casa no sea una buena opción, sencillamente que tienes que tener los trucos necesarios para no caer en la tentación de la distracción y hacer rendir muy bien tu tiempo:
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Se honesto contigo mismo
Antes de trabajar desde casa, necesitas ser sincero contigo mismo y evaluar tu realidad. ¿Estás realmente hecho para este tipo de libertad de responsabilidad? ¿Puedes realmente llevarlo bien? Esto no es un juicio. Es una pregunta genuina.
Algunas personas prosperan en entornos comunitarios y no pueden trabajar desde su casa si así lo desean. Otras personas necesitan el ajetreo y el bullicio que es tan común en una oficina para centrarse correctamente. Si eso eres uno de esos, está bien.
Esto no significa que usted no puede iniciar un negocio freelance o trabajo a distancia. Simplemente significa que necesitas cambiar las cosas un poco. Por lo tanto, obtener un espacio de coworking, o ir a la cafetería o simplemente ir a trabajar en su espacio público favorito. No importa lo que hagas mientras sea lo correcto para ti.
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Delimita un espacio de oficina en tu casa
El cerebro funciona a través del poder de asociación. Por lo tanto, si puedes crear un lugar en tu casa que es 100 % para el trabajo, tu cerebro lo sabrá y será mucho más productivo.
La clave aquí es que no se puede utilizar este lugar para nada aparte de tu trabajo. Si te distraes, inmediatamente levántate y camina. Cuanto más frecuentemente uses este espacio para trabajar y solo trabajar, más éxito tendrás al concentrarte y mantenerte productivo cuando te sientes durante el día.
Esto también te permitirá separar los espacios de tu vida personal con los del trabajo.
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Crea horarios
Una de las desventajas de trabajar desde casa es la falta de un espacio comunal (como el café o la terraza) donde se puede tomar descansos para recargar y reorientar tus energías. Establece horarios que te permitan saber cuándo trabajar y cuando tomar un descanso. En los tiempos de descanso trata de salir, lleva a tu perro a dar un paseo por la cuadra o a correr un poco alrededor de la hora del almuerzo para que vuelvas a trabajar sintiéndote re-energizado.
Respeta el tiempo de trabajo, así como se cumple con los horarios en la oficina debes tratar de hacerlo en casa, y no nos referimos solo a las horas sentado, sino también a las horas de descanso.
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Vístete para el trabajo
Tu oficina puede estar a sólo pasos de tu dormitorio, pero eso no significa que debes sentarte en tu escritorio con la misma ropa que llevabas en la cama. Si trabajas con la misma ropa que duermes es más fácil distraerte porque no hay una separación mental entre trabajar y estar en casa relajándose.
Hay algo extraño que sucede cada vez que uno se viste bien. Te sientes mejor contigo mismo. También te sientes más seguro y confiado.
Esto no significa que tienes que ponerte un traje y una corbata o una falda y unas medias. Lo que queremos decir es que te arregles un poco, quítate la pijama, ponte algo cómodo pero agradable y siéntate a trabajar.
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Empieza con lo difícil
Trata de empezar tu día con las tareas más complejas o que más tiempo requieran, una vez que las hayas completado seguramente te sentirás más aliviado. Hacer esto es importante en cualquier entorno laboral, pero cuando se trabaja en casa es un aspecto fundamental ya que si logras finalizar la tarea más compleja comienzas el día con un logro y el resto del trabajo fluye con más suavidad.
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Sal de la oficina
Trabajar desde casa puede generar que te sientas solo. Y cuando se vive y trabaja en el interior de las mismas cuatro paredes, puedes fácilmente aburrirte de tu entorno. Intenta dedicar una hora al día a hacer algo relajado fuera de su oficina. El cambio de escenario y la interacción social ayuda a pensar con más creatividad y genera más productividad cuando se está de regreso al trabajo.
Si eres un emprendedor que cuenta con la suerte de poder trabajar de casa, trata de hacerlo de forma efectiva y aprovecha las ventajas y la libertad que este tipo de trabajo aporta. Plantéate objetivos claros y cúmplelos. Toma tiempo para ti mismo fuera de la oficina. Recuerda que siempre hay una forma buena y una forma mala de hacer las cosas. Trabajar desde casa es una de esas cosas en las que si no tienes cuidado puedes hacerlo mal y perjudicar así no solo tu emprendimiento sino también tu vida personal. Si usas los tips anteriores seguramente tendrás tus objetivos encaminados a hacer las cosas de forma productiva.
CEO de Marketers Group. Agencia de marketing digital especializada en servicios de SEO, Publicidad digital y Business Analytics. Director del portal Tiempodenegocios.com. Formador in-company para empresas como Bayer, Roche, Evercom, Claró Partners entre otras.
