Obtener financiación constituye un reto para las empresas, porqué, aunque existen muchos canales que pueden proporcionar liquidez, es preciso elegir el más conveniente y acorde a las características de la necesidad y metas que se deseen conseguir.
Además, antes de acudir a una entidad financiera a solicitar por ejemplo una línea de crédito, ayudas gubernamentales -ya sea a nivel nacional o europeo- o utilizar el propio patrimonio, es conveniente que los responsables de las empresas analicen con detenimiento todos los pormenores del proyecto, sus necesidades y las garantías que pueden ofrecer, así como su capacidad de endeudamiento.
Es importante conocer de antemano las necesidades reales de financiación, cifra que hay que identificar e incluir en el plan de empresa, en el cual se contemplará un proyecto de inversiones inicial, la determinación de si el crédito o ayudas económicas para sufragar sus gastos se solicitará a corto, medio o largo plazo, además de la posibilidad de devolverlo en el tiempo acordado.
De igual forma, los emprendedores que vayan a crear una nueva empresa o los empresarios que deseen desarrollaron nuevas líneas de negocio, así como sobrevivir ante posibles ‘impagados’, deben estudiar si el patrimonio personal será suficiente para sufragar los objetivos y, si no es sí, a qué fuentes de financiación acudir.
En ocasiones se dan casos en los que los empresarios no están dispuestos a comprometer su patrimonio personal en estos menesteres, motivo por el cual se plantean acudir a otras fuentes de financiación como inversores privados, ‘business angels’, compañías de inversión, entidades bancarias, subvenciones del Gobierno, amigos o familiares.
Pero, no siempre se consigue financiación de estos agentes por lo que, tanto las entidades bancarias como los diferentes actores financieros, pueden ser sustituidos por empresas privadas que dan facilidades, a diferencia de ellos, porque tienen fondos disponibles para las empresas y suponen una alternativa de financiación.
Soluciones como el factoring permiten a las empresas obtener financiación mediante el anticipo del cobro de sus facturas para llevar adelante sus proyectos o solucionar sus problemas de liquidez en un momento dado, sin necesidad de avales, de una forma rápida.
Si cobran con pagarés, el descuento de efectos también puede ser una buena opción para financiar el circulante de su empresa, además están protegidos frente a impagados, si se realiza el descuento de pagarés sin recurso.
CEO de Marketers Group. Agencia de marketing digital especializada en servicios de SEO, Publicidad digital y Business Analytics. Director del portal Tiempodenegocios.com. Formador in-company para empresas como Bayer, Roche, Evercom, Claró Partners entre otras.
