La rutina se impone y en el lugar de trabajo son pocos los cambios que se materializan. De repente, la energía decae. ¿Reconoces lo que pasa después? La motivación y el compromiso con la empresa también pueden resultar afectadas. Y es que, aunque no deja de gustarnos lo que hacemos, necesitamos algo que nos devuelva la ilusión. Un cambio de aires, en el mismo lugar de trabajo, puede ser el mejor antídoto. Si te estás preguntando cómo crear una oficina para mejorar la productividad, estos consejos te ayudarán a tomar los primeros pasos.
Puede que te hayas sentido así o que, si eres un directivo, hayas reconocido este estado de ánimo en alguno de los trabajadores de tu plantilla. No es nada raro. Hay muchos casos en la actualidad. Quizá por ello, el 72% de los directivos tiene entre sus objetivos mejorar oficinas y acondicionarlas, según cifras de la consultora inmobiliaria Jones Lang LaSalle.
Sin embargo, a veces no es necesario llevar a cabo grandes reformas. Con pequeños retoques y teniendo claras las prioridades, conseguiremos que el equipo se sienta más a gusto y, en definitiva, descubriremos que crear una oficina para mejorar la productividad no es misión imposible. Desde la iluminación hasta la calefacción. Todo cuenta a la hora de contar con unos empleados más contentos y eficientes pero también más saludables. Estas son algunas de las principales sugerencias:
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Iluminación natural
La mejor luz es la del sol. No tiene rival, siendo capaz de aumentar la productividad, la energía y la creatividad. No está nada mal, ¿verdad? Las ventanas y claraboyas son las mejores aliadas en las oficinas y lo que nos permitirá que tengamos aire fresco y renovado cada día. Pero, si esto no es posible y necesitamos luz artificial, que sea indirecta. Es decir, que rebote en el techo o en una pared y no sobre los trabajadores.
Y por cierto, hablando de ventanas. ¿Sabías que un estudio llevado a cabo a los trabajadores de un centro de llamadas en California comprobó que el personal que veía naturaleza a través de su ventana manejaba las llamadas 7 veces más rápido que los empleados sin vistas? Conclusión: la naturaleza también inspira.
Áreas de descanso
Los empleados son menos improductivos si se sienten encadenados a sus escritorios. Por ello, debemos asegurarnos de que cuentan con un espacio para levantarse y dar unos pasos, aunque sea en la misma oficina. Más adelante, veremos que las áreas comunes son una buena receta contra el aburrimiento.
Un buen acondicionamiento
Encontrar la temperatura ideal es fundamental para que los trabajadores se sientan a gusto desde que empiezan su jornada laboral. Ahora que llega el frío, muchas oficinas empiezan su puesto a punto para hacer frente a las bajas temperaturas. Haber mantenido en buen estado la caldera es fundamental, como explican desde Mahico, empresa de reparaciones de Calderas de Madrid. Sin embargo, nos recuerdan que aún estamos a tiempo de llevar a cabo una revisión para así tener a punto la caldera y conseguir su mejor rendimiento. Tal y como informan en su página web, de lo que se trata es de personalizar el servicio. Y es que, cuando hablamos de oficinas, no todas necesitan lo mismo. De ello dependerá conseguir un buen acondicionamiento para aumentar la productividad en el trabajo.
Espacios comunes
Todo es de todos. Este debería ser el lema de cualquier lugar de trabajo. Por eso, disponer de espacios que se comparten, facilita la comunicación y las relaciones interpersonales. Y es que, si se apuesta por el trabajo en equipo, ¿por qué perder de vista esa unión más allá de los proyectos laborales?
No obstante, también conviene analizar el rol de los trabajadores de la compañía. Por ejemplo, si se dedican a responder llamadas al teléfono, puede que un espacio abierto no sea la mejor opción, pues habrá distracciones y ruidos que dificultarán la concentración. Pero incluso en estos casos, siempre se puede encontrar un lugar para las reuniones o encuentros más informales.
La elección del color
Cada color tiene un significado. Cada significado, nos afecta psicológicamente de manera distinta. Sabiendo esto, solo queda elegir los más acertados para nuestra oficina.
Así como el azul es sinónimo de estabilidad y de fuente para nuestra creatividad; el rojo es un color tan intenso, emocionalmente, que se asocia a aquellas tareas que requieren mucha concentración en los pequeños detalles. Pero esto solo es un pequeño aperitivo de toda la psicología cromática que, sin lugar a dudas, puede ayudarnos si nos hacemos la pregunta de cómo crear una oficina para mejorar la productividad.
Ahora solo queda hacer visibles estos cambios. El compromiso con tus trabajadores se traducirá en más productividad y en mayor sensación de bienestar. Los éxitos también se miden así. Merece la pena intentarlo, ¿no?
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CEO de Marketers Group. Agencia de marketing digital especializada en servicios de SEO, Publicidad digital y Business Analytics. Director del portal Tiempodenegocios.com. Formador in-company para empresas como Bayer, Roche, Evercom, Claró Partners entre otras.